GÜIAR DE CHANPIONS

Esa mañama se despertó mucho antes de que el sol hiciera su presencia tras los cerros que desde la terraza no podían verse. Se vistió lo más rápido que su somnolencia se lo permitió, intentó correr al baño, después hizo lo mismo cuando regresó a la habitación por su mochila e irse a trabajar.
Bajó el callejón en sólo un par de minutos, atravesó el jardín de Embajadoras y el gusano de calle llamado Sangre de Cristo. Ya en el centro de la ciudad sintió frío, hambre y más sueño. Revisó su celular el cual usaba como reloj pues no había a quien hablarle o enviarle un mensaje, seis con diez a.m.
Ese día el noticiero fue bueno, lo produjo intentando que fuera mejor que el del día anterior pero el conductor era demasiado idiota, algo que él no podía mejorar. Sobre todo porque era el mismo dueño del canal el que la hacía de condutor. Dos horas de escuchar a un hombre que bien pudo haber sido un mal imitador de cantinflas, que terminaba enredandose en las estupideces de quien no sabe decir sólo lo necesario.
A las nueve con treinta y tres abandonó el canal, necesitaba dormir, pero antes beberse un licuado de doña china del ano. Regresó a la paryjauz con su licuado y sus bolillos, fue hasta su habitación. Cayó dormido después de tomar su raquítico almuerzo. No durmió como quiso, lluvifilm no dejaba de gritar en la terraza, además loS gritos y cantos de otros tres inquilinos le espantaron sus tan preciados sueños. En la ware se celebraba sU última semana, él no participó de lleno en esta celebración, pues tenía que trabajar como esclavo sólo por el hecho de tener que ser bien visto por la sociedad. Pero eso no le impedía irse a trabajar después de tomarse unos tragos o fumarse un porro con los cacomorfeados habitantes de la paryjauz...

Ese día, él que no pudo dormir por la mañana no se dio cuenta de que sus "compañebrios" tomaban un fresco baño en el tinaco de la casa mientras lluvifilm les gritaba que ya dejaran de mamar o iba a llegar la tira y todo iba a valer verga... Ahora que lo recuerda cree que esa semana fue un sueño para los que estuvieron presentes...

cacocola